Parientes de jóvenes que murieron tras caer a pozo rechanza indemnización y entablarán juicio. Rescatistas confirman que no hubo señalización en el lugar
Tal vez, lo único que hoy se pregunten los deudos de las dos jóvenes universitarias que murieron al caer a un profundo pozo en la Universidad Los Ángeles de Chimbote (Uladech), filial Trujillo, es por qué les tocó padecer este drama a ellos.
Y aunque ningún castigo contra los responsables de la tragedia podrá devolverles la vida de Carit Caballero Agurto (19) y Nelly Siguenza Torres (21), sus familiares solo esperan que se haga justicia.
El fatal incidente se registró al promediar las 6:30 de la tarde del último sábado en la sede de la Uladech, ubicada en el pasaje Agua Marina de la urbanización Los Cedros.
Junto a Carit Caballero y Nelly Siguenza estaba Danny Villacorta Salvador (20). Éste último sobrevivió de milagro. Los tres llegaron tarde a clase y esperaban el cambio de asignatura en el patio, muy cerca de un pozo de 30 metros de profundidad que había sido cubierto apenas con lonas y alfombras.
Los jóvenes, sin saber del peligro al que se exponían, se acercaron demasiado al pozo para fotografiarse y jugar un rato.
Según declaraciones que brindó Danny a la Policía, la cubierta no soportó el peso de los jóvenes y sus amigas fueron las primeras en caer al fondo del hoyo. Lo que sí se ha confirmado es que al caer, la primera joven trató de apoyarse de su amiga; ésta a su vez jaló a Danny en su afán de sostenerse. Es así como los tres terminaron en el pozo.
Sin embargo, los aproximadamente 80 rescatistas —entre personal de Bomberos, Defensa Civil, Policía y Seguridad Ciudadana— advirtieron que cerca del pozo no había ninguna señal que alertara del peligro.
“Ese pozo debió estar clausurado y sellado. Lo que existía era una condición insegura. Los jóvenes aparentemente se sentaron en el pozo para tomarse fotos. La lona cedió y los tres cayeron al fondo del pozo que tiene una capa de agua de aproximadamente siete metros”, mencionó el jefe municipal de Defensa Civil, César Flórez Corbera.
Agregó que ambas jóvenes perdieron el conocimiento antes de llegar al fondo del pozo, pues se golpearon la cabeza en los anillos de concreto del hoyo. Todo indica de que murieron por ahogamiento.
Además, precisó que tras el rescate, las dos estudiantes presentaban fracturas en el cráneo y otras partes del cuerpo. Solo Danny, quien fue el último en caer, presenta fracturas que no son de consideración.
Demanda en marcha
Tras conocer esta versión, Ilder Caballero Rojas, padre de Carit, anunció que demandará a los representantes de Uladech por no colocar ninguna señalización que advierta el riesgo, pese a que el pozo se ubica en un área muy transitada por los estudiantes.
“Hemos comprobado que el pozo estaba cubierto con triplay y sobre ella tenía una pequeña lona que aparentemente disimulaba el riesgo, pero lamentablemente eso no sucedió con mi hija y sus dos compañeros. Intentamos conversar con las autoridades de la universidad, pero no lo pudimos hacer. Hasta nuestra casa se acercó una señorita aduciendo que cubrirían parte de los gastos del sepelio”, comentó mientras observaba el ataúd de su hija.
