Superintendencia protegerá inversión familiar en la educación universitaria

Permitirá avanzar una política nacional integral para mejorar la calidad del servicio en el Perú 

      La creación de la Superintendencia Nacional de Educación Universitaria (SUNEDU) –propuesta por el Poder Ejecutivo ante el Congreso-- le permitirá al Estado fiscalizar la calidad de la enseñanza para proteger la inversión que realizan miles de familias para darle un mejor futuro a sus hijos, aseguró hoy el ministro del sector Jaime Saavedra Chanduví.
       Recalcó que el estudiante universitario debe ser considerado en la práctica como un accionista minoritario que confía cinco años de su vida a la universidad y, por lo tanto, debe de tener la certeza de que al graduarse recibirá la llave para un futuro mejor.
      “Tenemos la obligación de asegurar que nuestros jóvenes tengan la oportunidad de una educación universitaria de calidad, que permita su realización personal y sean profesionales de alta productividad. Lamentablemente, la calidad de la universidad peruana no tiene los niveles de excelencia internacional que nuestros jóvenes se merecen”, sentenció el ministro.
       La SUNEDU se encargará de otorgar licencias de funcionamiento a universidades públicas y privadas que cumplan las condiciones básicas de calidad para dar el servicio. Saavedra explicó que la norma incluye a las privadas porque estas reciben beneficios tributarios del Estado, por lo que es imperativo velar porque estos recursos sean destinados realmente hacia fines educativos.
       Precisamente, en la iniciativa del Ejecutivo se sostiene que la renovación de licencias generará una reacción positiva del mercado de modo que se ofrezca una mejor oferta educativa a favor de más de 900 mil estudiantes que comprenderán la demanda futura.
Justo medio
       Sostuvo que la SUNEDU será el justo medio porque respetará la autonomía universitaria permitiendo efectuar una regulación eficaz y moderna, tarea necesaria en una economía social de mercado como la nuestra. “No podemos estar en el extremo de la autorregulación universitaria ni en el otro extremo de la intervención o control que impida la inversión, innovación o creatividad. Tenemos que lograr un justo medio”, remarcó.
       En esa línea, el Consejo Directivo de la SUNEDU comprenderá dos representantes del Estado y cinco de la sociedad civil que serán elegidos por concurso público. El superintendente será nombrado por el MINEDU.
Política nacional integral
       Saavedra explicó que al crearse la SUNEDU se recuperará el irrenunciable rol rector del Estado en materia educativa, establecido por la Constitución y ratificado por el Tribunal Constitucional. Por lo tanto, se tendrá la oportunidad de lograr un cuerpo legislativo que le permita al Estado avanzar en una política nacional integral para mejorar la calidad de la educación superior de cara a los próximos treinta años.
     “El rol rector se abandonó en las últimas tres décadas y se debe retomar por ser irrenunciable”, subrayó al tiempo de indicar que esa política nacional supondrá incentivar mayores inversiones procurando innovaciones en tecnología educativa; además de continuar respetando que las universidades privadas establezcan sus propias formas de gobierno, estableciendo regímenes académicos modernos y flexibles.
       Saavedra agregó que la política nacional deberá tener al menos cuatro pilares: Sistemas de información, fomento a la calidad, acreditación y licenciamiento a cargo del SUNEDU.
       En cuanto a los sistemas de información, Saavedra señaló que estos pueden ser implementados mediante alianzas público-privadas para que los estudiantes accedan a datos claves para decidir qué y donde estudiar, en base a indicadores de empleabilidad y salarios que recibirán en función a la institución y carrera que elijan.
       En tanto, el fomento a la innovación pedagógica, a la investigación y a la calidad, serán promovidos mediante la activación de fondos concursables y de subsidios que favorecerán la expansión de los programas de becas del Estado.
       Refirió que también se buscará mejorar los procesos de acreditación de la calidad educativa, ya que actualmente son muy complejos, por lo que se requerirá hacer algunas reformas en el marco legal del Sistema Nacional de Evaluación, Acreditación y Certificación de la Calidad Educativa.